Party Down (Starz, 2009-10)
Cuando mi querido Alex dice que hay que ver algo, yo sigo su consejo sin rechistar. Es un tipo ágil de mente, de gustos diversos, cachondo y con muy buen ojo para descubrir riesgos y joyitas. La singular Misfits, por ejemplo, se la debo a su insistencia. En mayo, avisaba de que Party Down era “La mejor comedia que no estás viendo“. Acudí al trote y… ¡me di de bruces con la decepción! ¡Ouch! Un “no pero no” clarísimo.
En positivo se puede hablar de la presencia de caras conocidas (como Kristen Bell, Molly Parker o Jane Lynch), unos actores notables en su contención gestual y mucha crueldad en la radiografia del fracaso: los más dolorosos, los retratos del “activo” líder Ron y del desganado barman Henry. Pero poquita salsa más; ingredientes insuficientes para una comedia minimalista que basa su fuerza en la incomodidad de la vergüenza ajena y en el irrevocable fracaso profesional y vital de sus protagonistas. Quizá en la segunda temporada mejoró o quizá por todo esto que no me gusta los propios responsables de la cadena la han cancelado…
The IT Crowd (BBC, 2006-?)
El declive de esta serie ya me da mucha más pena. Muchísima. Durante el último quinquenio, The IT Crowd ha sido líder indiscutible de las comedias sobre inadaptados sociales (en versión freak, geek y nerd), un producto mucho más atinado que The Big Bang Theory, con la que a veces se la relaciona vagamente. Las historias escritas por Graham Linehan han perdido descaro, originalidad. Por desgracia, esta cuarta temporada ha certificado la fecha de caducidad de su método.
En la entrega de este verano, los gags se han deslizado por el tópico y se han pasado de rosca con ese personaje tan desmedido que es Reynholm. Una vez más, el mejor síntoma de decadencia de una comedia es cuando se refugia en el exceso… Total, que a las historias les ha faltado una reescritura, otra vuelta de tuerca. Los personajes, por desgracia, no dan más de sí y lo rimbombante de las situaciones… se ha pasado de rimbombante.
Eso sí, en medio de la temporada mediocre, uno se encuentra con una filigrana, delirante como antaño, en ese impagable regalo que fue “Italian for beginners” (4.4.). Las tramas de los tres personajes sí estaban endiabladamente bien engrasadas: Jean amontonando mentiras a la italiana, Roy obsesionado con un traumático incendio en un balneario y Moss… Moss… en fin, “dando a luz” en una de las secuencias más disparatadas y divertidas del año:
Cortesías (¡Vaya tele! y Sons of Anarchy)
La entrada Dos comedias que no aparece primero en Diamantes en Serie.